Caminando entre paisajes intimistas, cálidos y húmedos, que vivifican cada nube, cada gesto, cada recurso arquitectónico, apareciéndose como selvas desbordadas de tonos mercunianos. Mi obra, puede que confunda o en su contrario ilumine a otros corazones, sin duda son el fruto de una lucha digna y apasionada por la fantasía y la magia olvidadas. Las pinceladas dan forma a esos mundos fantásticos que no son más que pedacitos de sueños.